Novela 1 Capitulo 28 "El gran día de Isabelle"

Cap28 “El gran día de Isabelle”

Entré en la habitación de mi amiga. Estaba preciosa, el vestido era así: http://vestidos.org/files/2011/06/vestidonovia2.jpg  y le sentaba genial. Tenía los ojos llorosos cuando reparó en mí. Yo también quería llorar, verla así tan bonita, preparada para dar su gran paso me emocionaba pero sabía que si me echaba a llorar ella también lo haría y se le correría el maquillaje, no era cosa de que apareciera hecha un mapache el día de su boda; asique suspiré y me dirigí hacia ella.
Nos fundimos en un gran abrazo. Esta vez no pude contener las lágrimas.
V-Dios mío-dije separándola suavemente de mi-Estás preciosa.
I-¿Y tú? ¿No vas a cambiarte? También tienes que estar preciosa.
V-A eso voy ahora mismo, solo que quería darte una buena noticia. Me han dado un regalo de boda para ti, no es material, pero seguro que te hace la misma ilusión.
I-¿De quién es?-preguntó ilusionada.
V-De Liam.-su cara se volvió sombría por un momento. Pero sus ojos estallaban en sorpresa.-quiere pedirte perdón por tantos años de enfrentamiento estúpido y quiere que le llames.
I-¿Y por qué no me llama él a mí?-tenía cierto tono de desdén en la voz.
V-De hecho, acaba de venir a pedírtelo en persona, pero como le dije que te estabas vistiendo no quiso molestar y se fue.
I-Que mono-la oí susurrar-Bueno, ya le llamaré luego.
Se giró y volvió con sus damas de honor. Yo me marché a cambiarme.
Me puse este vestido que había comprado el mismo día que ella el suyo: http://www.polyvore.com/isabelles_wedding/set?id=68520044 tenía muchísimas ganas de ponérmelo y, justo cuando acababa de ponerme el último pendiente sonó el timbre de la casa. Oí a Isabelle que me gritaba que abriese y le hice caso. Casi me caigo por las escaleras, pero mereció la pena abrir, pues tras la blanca puerta de la casona de Isabelle estaba Niall, mi Niall; resplandeciente con su traje nuevo y la corbata del mismo azul que el de mi vestido que le había dado hacía unos pocos días.
Sus ojos me recorrían el cuerpo de arriba abajo, con la boca abierta como un sapo. Dulcemente le cogí el mentón y se la cerré.
V-Cariño, cierra la boca que te van a entrar moscas.
Me besó suavemente en los labios.
N-Si no me la llegas a cerrar, entrarían más bichos aún Jajajaja. En serio, estás preciosa.
V-Da igual, hoy es el gran día de Isabelle, ella está mejor que yo.
N-No lo digas ni en broma.
V-Aún no la has visto…
N-No me hace falta verla, tú eres la más hermosa, siempre; esté quién esté.
Volvió a besarme.
V-Bien, será mejor que no discuta contigo, siempre consigues los que quieres. Voy a preguntarle a Isa si me necesita aquí y nos vamos a la iglesia. Tengo que hacer retoques de última hora.
N-No sé porque te preocupas tanto-me dijo mientras me levantaba del sofá- Todo estará bien, lo has organizado tú, eso lo hace perfecto.
V-Si Nialler, pero hasta las cosas más perfectas a veces tienes defectos mínimos que las terminan por destruir porque no se para uno a arreglarlo.
Dicho esto subí de nuevo al segundo piso, dejando en el salón a mi chico, pero esta vez agarrándome al pasamano.
No había terminado de subir la última escalera cuando oí un grito desgarrador procedente de la habitación de mi amiga. Niall, asustado también subió las escaleras de dos en dos y ambos corrimos juntos hasta la puerta del dormitorio, yo agarrando como podía el vestido para que no se rompiese.
Lo que vimos al llegar me congeló la sangre en las venas, me agarré a Niall y comencé a llorar. Las damas de honor estaban todas apretujadas en una esquina, llorando a lágrima viva y gimiendo de dolor.
No podía creer que le hubiese pasado eso a Isabelle y justo el día de su boda.